Últimamente podemos ver cómo aumentan los casos de deportistas amateurs que no cuentan con suficiente asesoramiento o supervisión de un especialista en deportes, actividades físicas o, en el ámbito que nos interesa, en lo nutricional.

Si bien iniciar alguna actividad deportiva es una excelente decisión, también conlleva profundos cambios nutricionales, como la correcta hidratación, la elección de alimentos pre y post ejercicio, la alimentación durante el tiempo que se lleva a cabo o, incluso, la nutrición asociada a prevenir desgaste o lesiones dependiendo de la actividad física asociada.

En esta ocasión nos gustaría enfocarnos en un macronutriente específico que ha sido puesto en la palestra pública para ser severamente acusado por muchos, nos referimos a los “carbohidratos” o “hidratos de carbono”.

La información errónea que se comparte a través de medios de comunicación y redes sociales nos lleva a cuestionarnos su importancia real, sus funciones y su ingesta, muy a pesar de que se les considera como macronutrientes. Hay personas que incluso optan por sacar los carbohidratos de su dieta o los culpan de ser responsables del sobrepeso, la obesidad o la diabetes.

En este punto comienzan a surgir las dudas principales para quienes inician algún tipo de ejercicio o algún deporte de manera amateur. ¿Es correcto dejar de consumirlo? ¿Nos aporta algún beneficio a la hora del ejercicio? ¿Qué sucede si no se consume? ¿Por qué son tan mal vistos por la población en general?

Es importante destacar que en la actualidad se produjo un aumento excesivo de su consumo en general. Por ello, la ineficiente discriminación entre aquellos carbohidratos simples o complejos, la búsqueda incansable de la reducción de peso casi instantánea, las llamadas dietas de moda y la escasa información que manejan muchas personas en redes sociales, fueron alimentando la idea de que consumir carbohidratos es innecesario o que sencillamente ocasiona la gran lista de problemas alimenticios que colman las listas de los entes de salud de nuestro país.

Sin embargo, este grupo de alimentos es ampliamente conocido en el mundo deportivo por aportar energía rápida, debido a que su oxidación genera una mayor cantidad de moléculas de ATP (molécula responsable de la energía) que las producidas por oxidación de la grasa. Sumado a esto, realizar deportes de mayor intensidad disminuye la cantidad de oxígeno debido al alto esfuerzo físico, y para cubrir esa demanda se necesita una fuente de energía eficiente, como los carbohidratos.

¿Cómo debemos incorporar los carbohidratos eficientemente en nuestras dietas?

¿Todavía no te convence? Te dejo acá unas recomendaciones y unas informaciones que te ayudarán a aceptar mejor a este macronutriente tan incomprendido:

• La principal fuente de energía durante el deporte proviene del glucógeno muscular y glucosa sanguínea (que se genera después de la degradación de carbohidratos disponibles en los alimentos).
• Dentro de las competencias o el deporte, los carbohidratos serán usados como fuente de energía rápida, por lo tanto, su bajo consumo podría causar mareos, vómitos, dolor de cabeza o fatiga.
• En algunos casos, en deportes de alta resistencia por el tiempo prolongado de este o el esfuerzo físico realizado, los especialistas recomiendan incluso la sobrecarga de carbohidratos antes de las competencias para evitar la fatiga durante la práctica o mientras se lleva a cabo.
• Existen diferentes tipos de carbohidratos y su elección dependerá del ejercicio a realizar, sus diferencias en la osmolaridad y estructura repercutirán en la digestión, absorción, disponibilidad de la glucosa para ser oxidada y llevada a los músculos.