1. Elevaciones de hombros:
Coge aire a la vez que llevas los hombros en dirección hacia tus orejas contando hasta tres. Después deja caer los hombros mientras sueltas el aire. Repítelo 5 veces.

2. Balanceo de cabeza:
Lentamente balancea la cabeza de lado a lado en dirección a los hombros. Hazlo despacio y no te quedes mucho tiempo en cada lado ya que no estamos hablando de un ejercicio de estiramiento sino de movilidad. Repite 5 veces hacia cada lado.

3. Abre el pecho:
Pon tus manos sobre las caderas y mientras coges aire profundamente, junta las escápulas (las paletillas) entre ellas abriendo el pecho todo lo que puedas.

4. Mirando al suelo:
Lleva la barbilla hacia el pecho contando hasta tres lentamente. No arquees la parte alta de la espalda. Este ejercicio produce un estiramiento en la parte posterior del cuello. Continuando con un movimiento lento y controlado, lleva la cabeza hacia atrás hasta quedar mirando al techo. Repite de 3 a 5 veces.

5. Automasaje:
Lleva tu mano derecha a tu hombro izquierdo y desliza tus dedos a lo largo del músculo. Cuando acabes cambia de lado.